INTRODUCCIÓN A LAS INVERSIONES (I)

"El interés compuesto es la fuerza más poderosa de la galaxia". Albert Einstein.

En un principio esta entrada iba a ser una única, en la que introduciría ya las formas de invertir, pero pensándolo mejor prefiero hacer una introducción previa a las herramientas a usar en la inversión. Además, por experiencia a la hora de invertir en España hay muchos mitos que tratar, alguno de los cuales veremos aquí. Tenía ganas de empezar esta sección desde que comencé el blog, pero sin lo que he explicado previamente sobre dinero, inflación y pensiones habría sido muy difícil que creciera un interés acerca de invertir. Sin embargo, una vez hemos descubierto que el dinero va desapareciendo sin que podamos evitarlo, y que las pensiones no son nada seguras, sólo queda una solución: ahorrar e invertir.

Comenzaré por el principio: la posibilidad de ahorrar. Es complicado que alguien ahorre cobrando, digamos, 1000 €, y teniendo gastos mensuales de casa, ropa, comida, etc. Esto no quiere decir que lo que habría que hacer es subir el salario mínimo, ya que si obligamos a subirlo todo costará más, y estaremos en las mismas. La sociedad tiende a buscar salarios más competitivos a medida que avanza la vida profesional: aquel que comienza a descargar cajas querrá pasar a jefe de almacenamiento. Aquel que repone productos en un supermercado pasará a jefe de reponedores. Por otro lado, si en un sitio pagan menos que en otro por hacer lo mismo, nos cambiaremos y llevaremos nuestra experiencia al otro sitio. Esto se hace hasta que cada uno se queda a gusto con su salario, porque cubre sus gastos y tiene dinero para "hacer su vida": ocio, vacaciones, etc. Es entonces cuando se produce el ahorro. 

Con la crisis ciertamente hay mucha gente que lo ha pasado mal. El ahorro es fundamental para pasar los baches de forma más suave. Un día conocí a una persona que lo había pasado muy mal con la crisis: su padre, dedicado a la industria del cine, ya no encontraba trabajo, y él no había podido terminar sus estudios ni formarse. Dejó el colegio con 16 años y apenas acabó la E.S.O. Sus padres, eso sí, habían conseguido un préstamo para otra casa de vacaciones, y él tuvo que ayudarles. Los "buenos tiempos" quedaron atrás y se dio cuenta de que para prosperar no queda otra que ahorrar, y ahora intenta formarse cuando tiene tiempo. El ser humano se acostumbra muy fácilmente a la "buena vida", pero es mayor su capacidad de superación de las situaciones adversas. Vuelvo a poner el ejemplo de mi abuelo: siendo un trabajador de Renfe consiguió poco a poco pagar sus deudas e ir guardando dinero, aún sin tener más formación que la del colegio (eso sí, se acuerda de todas las clases; a mí no me preguntéis qué hice ayer). Tiene ahora una casa en la playa y vive cómodamente. Si mi abuelo, con sólo su sueldo, pudo dar formación a sus hijos, casa y vacaciones, y aún así consiguió ahorrar, entonces pienso que es posible y que tendría que ser uno de los objetivos en todas las familias. 

En España nos hemos acostumbrado a las deudas: dos casas, dos coches, o casa y coche, más vacaciones, etc. Vivir lo más cómodamente que podamos, aunque luego haya que pagar un crédito a 30 o 40 años. Esto ya se ha aprendido, con la crisis, que no funciona: del trabajo te pueden echar y te quedas sin nada. Lo más importante es pagar todas tus deudas, y evitar la tendencia a pedir más: vivir con lo que tienes y no con lo que te puede dar el banco. El banco es un negocio, ni bueno ni malo, pero a mí se me caería la cara de vergüenza si tuviera que pedir dinero a mis padres o mis abuelos: tampoco se debería de pedir al banco. A esto se le llama no vivir por encima de tus posibilidades, y es lo que hay que intentar hacer (dentro de lo posible). Esto lo han aprendido, con excepciones, el resto de países, pero iba tan bien en España hasta hace poco que no nos preocupaba lo más mínimo. Si conseguimos vivir algo por debajo de nuestras posibilidades (no gastamos todo lo que cobramos cada mes) es entonces cuando se da lugar a un fenómeno interesante: nuestra cuenta del banco crece y el propio banco nos ofrece "productos" (depósitos, fondos...), a este fenómeno se le llama ahorro. Se produce una vez hemos pagado nuestras deudas, hemos cubierto gastos, hemos ajustado todo lo posible y por fin podemos pensar acerca de nuestro futuro: si nosotros trabajamos por dinero, ¿por qué no hacer que el dinero trabaje por nosotros? ¿Es esto posible, o un sueño? Podemos dar entonces la bienvenida a la inversión.

En España sucede con las inversiones una cosa muy curiosa: nos gustan los "pelotazos" o las cosas "muy seguras". Pelotazos como comprar una casa y que se revalorice un 300% o ganar la lotería, el dinero fácil, vaya. Cosas muy seguras como depósitos al 0,5% en 6 meses o un año, o letras del tesoro al 1,5% que apenas cubren la inflación. Pero el dinero fácil no lo es tanto porque toda burbuja acaba pinchando. Sobre la lotería yo le doy la siguiente explicación: si tu vecino compra y le toca, te come la envidia, y en España sobra de esto. La lotería tiene una esperanza matemática negativa, y una probabilidad ínfima. En cuanto a lo "seguro" ni es tan seguro (¿o no han quebrado las cajas?) ni cubre la inflación por lo que yo no lo considero una verdadera inversión.

Claro está, hemos crecido rodeados de proverbios como "Con el dinero no se juega" pero "Quien no arriesga no gana". Se tiene un cierto miedo a la inversión y se suele buscar ese dinero fácil (a veces incluso bordeando lo legal), se copian negocios y cuando alguien triunfa, es porque habrá hecho algo malo. Nadie nos ha enseñado la clave en toda inversión: la paciencia. Y esto es algo donde los demás países desarrollados nos llevan cientos de años de adelanto, en cultura financiera e inversión. Como introducción a la inversión voy a enseñar unos gráficos:

Podemos observar por tanto el tiempo en años (eje horizontal) y lo que ganamos con un interés constante (eje vertical). Aunque ahora explicaré todo esto un poco, quiero dejar claro que si nos fijamos, en ambas el tiempo juega un papel fundamental: es pasado unos años cuando la curva se empieza a levantar y tiende al infinito.

Esto quiere decir que, si fuésemos inmortales, todos invirtiendo el dinero seríamos millonarios con el paso del tiempo. Noto alguna risa, caras extrañadas y alguno hasta llamando al 112. No es de extrañar, pero no me he vuelto loco (todavía). Por supuesto, es imposible que eso ocurra porque no tenemos un tiempo "infinito" para vivir.

Lo que importa de estas gráficas es entender lo que quiere decir "tener paciencia" y no dar el "pelotazo" de entrada. Veréis, a lo que se llama interés es a lo que se gana por tener invertido el dinero un tiempo (normalmente en términos anuales, esto es, un año). Este interés puede ser fijo (y saberlo antes, por ejemplo en los depósitos) o variable (y tener un pronóstico pero nada prometido). Los gráficos presentan un interés del 10% anual (rojo) y del 7% (verde). Además, el primero supone una inversión de 1000€ inicial y única, y el segundo de 10000€, también inicial y única. Se puede observar que el segundo llega antes al millón de euros (con un 10% en 49 años, y con un 7 en unos 70). Tardan, y no sirven, pero llegan. Pero este no es un blog que enseña a ser millonario, para eso hay formas mejores (montando una empresa, por ejemplo). Es un blog que enseña a invertir, para lo que hay que tener paciencia. Conseguir un 10% constante durante 49 años es bastante complicado. Incluso un 7 sería algo para quedarse satisfecho. No obstante, un 5 es muy normalito, incluso bajo, en interés variable.

¡¿Pero cómo, interés variable y no fijo?! Sé que a los españoles nos cuesta, pero el problema de los depósitos es la extrema "seguridad" que garantizan con el interés fijo. Un 0,5 o incluso un 1 apenas mantiene nuestros ingresos al día con la inflación, y menos aún nos ayuda a formar con ellos algún tipo de colchón para la siguiente crisis. Además, las entidades pueden quebrar, con lo que estarán "seguros" relativamente. Nos fijamos en la comparación entre un 6,5% y un 1% de la siguiente gráfica (comenzamos con 10000€):

El problema de tener ese 1% es que el dinero no trabaja, se acostumbra a vaguear y se queda así. Además, alguien me puede decir que no he descontado la inflación que hay año a año, y es cierto, pero en ambos casos. Es decir, que aunque la curva verde disminuya, la roja lo hará más e incluso puede que hayamos perdido dinero por ir demasiado sobre "seguro". No obstante, siempre hay que tener mucha cabeza, y saber en todo momento el riesgo que se asume. No tendría sentido que ese 7% se obtenga con una moneda a cara o cruz todos los años, o meter todo el dinero que se tenga a ese 1% "seguro", porque perderíamos gran parte al descontar la inflación. Otra de las cosas más importantes que hay que hacer al invertir es diversificar.

Llegados a este punto, en el que hemos aprendido la importancia del ahorro y la necesidad de invertir el dinero que podamos ahorrar, merece la pena hacer algunas puntualizaciones.

• Primero, al invertir cada uno asume su propia responsabilidad por el dinero invertido. Esto es, cada uno asume el riesgo que considera. No obstante, dejar el dinero en el banco o en un depósito que de menos del 1% no nos salvaría de la inflación (ahora está entre 0,5 - 1 aunque varía todos los años).
• Segundo, la necesidad de disponer del dinero es fundamental. Nadie puede arriesgarse mucho si sabe que lo va a necesitar al mes que viene. El dinero del que hablaremos será de "jubilación", es decir, dinero del que no tendremos una necesidad urgente imprevista. Ahora bien, hay que fijarse en que es probable que este dinero podamos recuperarlo antes de jubilarnos, mientras que el de la pensión del Estado no (debe de ser por su carácter "social").

Pero bueno, ¿qué es esto del interés compuesto?. Veréis, existe el interés simple y el compuesto (gran descubrimiento matemático). El simple se forma de la siguiente manera: tengo 1000€, recibo un 10% anual (es decir 100€) y me los gasto. Al año siguiente sigo teniendo 1000€, con lo que vuelvo a recibir 100€. Todo bien, pero de tu inversión inicial no le estás quitando la inflación. Con lo cual la propia inversión se va deteriorando.

Y así sucesivamente, cada año tendrás unos intereses del 10%*número de años, pero estos intereses los recibirás y no se reinvertirán. Así es como funcionan los dividendos, por ejemplo (la empresa reparte parte de sus beneficios que no invierte en crecer).
Sin embargo, ¿qué ocurre si te lo quedas y lo reinviertes? He aquí interés compuesto: tienes 1000€ y recibes 100€, al año siguiente tienes 1100€ porque lo reinviertes todo, y ganas 110€ (ya es 10€ más que de la otra forma). Y así sucesivamente. Claro que 10€ no es mucho, ¿no?, pero qué pasa si lo dejamos un tiempo:

Podemos observar que, aunque al principio la diferencia es pequeña, con el tiempo se vuelve inmensa. Esta tabla compara inversiones iniciales de 1000 y 10000 €, con un interés del 10%. Es ilustrativo, para entender que el interés compuesto es una herramienta con un potencial inmenso. También cabe destacar que no he eliminado la inflación, y que un interés del 10% es algo improbable: no obstante, estas inversiones tienen una inversión inicial, y ninguna entre medias. Nada nos impide, una vez hemos invertido un poco, volver a invertir periódicamente durante todos estos años. Es entonces cuando el potencial del interés compuesto se desata.

¡Pero bueno, aquí hablamos mucho de si un 10, un 7 o un 6,5, y yo eso no lo veo en el banco! Calma, que todavía estamos empezando. Todo tiene una explicación, pero primero tienen que quedar las cosas claras. Hay que entender que el interés compuesto es la herramienta primordial del inversor, la necesidad de formar un colchón (no sea que las pensiones pierdan su carácter social), y la necesidad de diversificar ya que, aunque continuemos teniendo un producto de bajo riesgo como un depósito, podríamos tener un 75% de nuestro dinero en depósitos y el otro 25% en algo más arriesgado, pero con más futuro. Sobre todo tener cabeza y entender. No hace falta ser un Warren Buffet para invertir, ni estudiar un curso de gestión de carteras, y pienso demostrarlo. :)

Sería increíble que hubiera algo que diera de forma probable ese interés, ¿verdad?, ¿constantemente?, ¿y que cobrara comisiones muy pequeñas?, ¿y con poco riesgo? Sería un sueño, ¿verdad? ¿O es posible que exista?